El pasado 8 de febrero se organizó en la Sala de Actos del ICRA-BUSCA el seminario ‘ La expedición al Mar de Aral: testigos de un mar ‘, realizado por el investigador Rafa Marcé . Una charla que contó con una excelente acogida por parte del personal de ICRA-BÚSQUEDA y otros miembros de la comunidad científica en Girona y Barcelona. En la charla Marcé repasó la historia del desastre ambiental del Mar de Aral, considerado el cuarto lago más grande del planeta y que lleva secado desde los años 60 a consecuencia de los grandes programas de irrigación promovidos por la Unión Soviética. Esto ha supuesto una catástrofe por el ecosistema y los cientos de miles de personas que dependían de la pesquería de agua dulce más productiva del mundo. En este sentido, se repasó la expedición al Mar de Aral que, el equipo liderado por el ICRA-BUSCA y el propio Rafa Marcé, emprendieron el mes de agosto de 2022 para muestrear testigos de sedimento y averiguar si la catástrofe natural más importante del siglo XX también comportó la liberación de decenas de millones de toneladas de dióxido de carbono en la atmósfera promovido por la descomposición del carbono orgánico acumulado en los sedimentos del antiguo mar durante milenios. En el seminario, Marcé detalló los objetivos y la aventura del equipo de investigación en el marco del proyecto Alter-C, y también se adelantaron algunos de los resultados que ya se han podido procesar. «Nuestro trabajo en Aral no solo tiene una vertiente científica: si demostramos que el secado del lago tiene consecuencias en cuanto a las emisiones de carbono en Asia Central, empezaríamos a valorar si el ahorro en emisiones de carbono que tendríamos si las aguas devolvieran al mar, podría ser considerado una opción de mitigación del cambio climático», afirma Rafa Marcé.